VA DE REGALOS
Bueno, ya se ha acabado la Navidad. Han sido días intensos, llenos de encuentros, comilonas, compras y regalos, regalos, regalos... Para algunos eso del regalo es una fiesta: buscar y rebuscar algo que le guste a alguien a quien ama o aprecia. Toda una ciencia. Para otros es un suplicio. A todos nos han regalado algún objeto imposible que nosotros jamás nos hubiéramos comprado, y hemos tenido que poner una generosa sonrisa y mentir como bellacos. ¿O no? También hemos tenido que regalar a alguien que no nos cae nada bien; sólo porque es Navidad. Sobre eso reflexiona Manuel Rodríguez Rivero en un artículo aparecido ayer en el periódico El País. Leedlo, a ver que os parece.
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